En años recientes, Venezuela ha ganado poca reputación entre los viajeros internacionales por decirse que es un país de conflictos sociales y políticos. Es cierto que Caracas, la capital, es un colapso urbano. Allí, la élite vive en comunidades cómodas y protegidas, mientras que en las afueras de la ciudad, los llamados barrios luchan para sobrevivir. ¿Y por qué quisiera usted visitar este país? La respuesta está muy lejos de la selva de concreto de la capital. Es en el corazón real de Venezuela, donde la belleza natural y la biodiversidad son verdaderamente excepcionales.
Su primera experiencia en Venezuela probablemente será su llegada al aeropuerto de Maiquetía, a unos 25kms de Caracas. Olvídese de la ciudad y vaya al interior del país. La Venezuela real todavía no ha sido abrumada por el turismo masivo: es un Nuevo Mundo de aventura. En nuestro Eco-campamento del virgen Delta del Orinoco usted puede quedarse con los indígenas Ameríndios Warao, cuya cultura ribereña les dio el nombre de “La gente de la canoa”.
Después del Delta podrá encontrase a las orillas del impresionante río Orinoco en el pueblo colonial de Ciudad Bolívar, donde Simón Bolívar – El Libertador – forjó la historia de Venezuela. Desde allí, después de volar al hermoso Parque Nacional Canaima usted podrá pasar una noche en las riberas de la espectacular laguna. Después viajar en canoa y caminata selvática hasta el campamento del Salto Ángel (la caída de agua más alta del mundo), y nadar en las frescas y claras aguas al pie de la montaña.
Si usted acepta el reto físicamente, le ofrecemos una expedición de 6 días caminata a campo travieso hasta la cima del ancestral y formidable tepui Roraima, el más alto de los distintivos tepuyes que predominan en las planicies y selvas de la impactante Gran Sabana. Después del viaje, usted se podrá relajar por 1 o 2 días en el pequeño pueblo de Santa Elena de Uairén – muy cerca de la frontera – con su amplia población de Pemones Ameríndios.
Muchos de nuestros itinerarios comienzan o terminan en la Caribeña Isla de Margarita, justo en la encantadora población pesquera de Juan Griego, donde el sol se pone en el océano 365 días al año. En la isla usted puede ir a un jeep safari wind-surf y kite-surf, cabalgata a las montañas, navegar, o simplemente relajarse en las doradas y arenosas playas donde el sol es caliente y el ron cuesta poco. Desde Margarita podrá dar un “salto isleño” por avioneta al paraíso Archipiélago de los Roques, donde las aguas claras azul-verdosas del Mar Caribe son perfectas para bucear. Desde Margarita, usted también puede volar hacia las islas inglesas de Trinidad y Tobago, San Vincent, Grenada y Dominica.
Viajando por avión al aeropuerto de El Vigía o por bus nocturno usted podrá llegar hasta la ciudad universitaria de Mérida. Acá usted podrá caminar, cabalgar o pedalear por las laderas de las montañas de los vastos Andes (la “columna vertebral” de Sur América). Tal vez usted pruebe un vuelo en parapente o se lance a un emocionante viaje de balsas en ríos rápidos. En los ranchos de Los Llanos, usted podrá hacer un foto-safari a caballo a través de esta magnífica reserva natural, y ver animales exóticos como el caimán y la anaconda. Tome una de nuestras rutas sugeridas o pídanos que planeemos un viaje especialmente para usted. Para todo lo que necesite, su gran Aventura en Venezuela comienza aquí.
